El Chef Jordi Roca vuelve a hablar tras siete años y agradece a todo el mundo por su apoyo

El Chef catalán ha compartido en redes sociales un vídeo en el que agradece poder volver a hablar y el apoyo recibido durante estos años

El menor de los hermanos Roca, Jordi Roca, es un chef muy reconocido en toda España. Jordi tiene un restaurante con tres estrellas Michelin en el que las reservas se tienen que pedir casi con un año de antelación. Además, ha sido reconocido como mejor repostero del mundo, ha montado una heladería onírica, un hotel inspirado en el cacao, etc. Sin embargo, a pesar de todo ello, Jordi Roca ha asegurado set el «tío más feliz del mundo» por haber podido recuperar su voz.

Ya muchos sabían que el chef había sido diagnosticado con distonía, una enfermedad neurológica cuyos síntomas afectan a la tensión muscular y la afonía. Sin embargo, no ha sido hasta ahora que el responsable de los postres en El Celler de Can Roca no ha comentado sobre su situación.

«No sabéis la alegría que tengo de poder hacer este vídeo, con esta voz que se me ha quedado voz de locutor de radio a las dos de la mañana. Como sabéis muchos de vosotros, hace siete u ocho años que perdí la voz por completo, me quedé totalmente disfónico. Durante este tiempo he tenido picos de voz que han ido yendo y viniendo, pero cada vez estoy un poco mejor, he ido mejorando la fonación», comentaba.

El chef Roca ha comentado además que su voz «viene y va», por lo que podría volver a perderla mañana

«He aprendido a hablar sin esfuerzo. Aunque parezca mentira, cuando te pasa algo como lo que me ha pasado a mí, cuesta muchísimo retomar el hilo de la voz, e incluso puede ser que mañana no tenga», decía a través de redes sociales. «Pero ya que la tengo, quiero agradecer a tantísima gente que durante este tiempo me ha apoyado y me ha dado consejos durante el proceso de recuperación y rehabilitación».

Esto último lo decía porque en el vídeo de Instagram compartido mencionaba a casi 40 personas. Entre ellas se encuentra su mujer y su familia, además de los jefes de cocina y algunos camareros.

El cocinero ha acabado el vídeo pidiendo a la gente que valore lo que tiene. Para todos es insignificante lo que tenemos hasta que lo perdemos. «Amo El Celler, amo a mis hermanos, a mi familia, a mi pequeña… No sé qué más puedo pedir. Hoy soy el tío más afortunado del mundo. Valorad la voz. Valorad lo que tenéis».